martes, 18 de marzo de 2008

Atrapados en el metro

Hoy fui a comer con una amiga, y quedamos de vernos en un punto intermedio entre su trabajo y el mio. El punto de reunion no me quedaba tan retirado, a dos estaciones del metro. Habian tantas cosas que platicar que se nos fue el tiempo y se me hizo un poco tarde para regresar a la oficina. Segun mis calculos, llegaria a lo mas 10 minutos tarde.

Solo que no contaba con que, entre dos estaciones, el metro se detuviera. Las luces del vagon se apagaron y por ende tambien el aire acondicionado. Y en estas condiciones es cuando las personas sacan lo peor de si. Un grupo de chavitas empezaron a escandalizar por diversion. A mi me molesto el ruido, porque yo estaba cerca de ellas. Pero quien les reclamo fue alguien quien no soporto mas su algarabia. Y sin luz, algunas otras personas se anadieron a la protesta. En unos momentos, el griterio no se hizo esperar, unas defendiendo su supuesto derecho a escandalizar ("si yo pague mi boleto, puedo hacer lo que quiera") y otros callandolas. De los reclamos, pasaron a los insultos. Estuvimos detenidos por mas de 15 minutos, a obscuras, con gente ansiando por llegar a su destino (como yo), acalorados. Y estas personas gritandose? Pagaron su boleto, si, pero... no les da derecho de alterar la ya de por si desesperante situacion.

Me senti como espectadora de un experimento del comportamiento humano en situacion de stress. Y el marcador fue STRESS 1 - CIVILIZACION 0.

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